Además de las ya conocidas propiedades de la manzana, entre las que destaca ser una rica fuente de vitaminas y minerales, parece ser que un estudio reciente ha demostrado cierta utilidad y eficacia en una enfermedad tan descuidada terapéuticamente como es la enfermedad de Alzheimer.
Ciertamente, el estudio realizado por varios investigadores del Center for Cell Neurobiology and Neurodegeneration Research de la Universidad de Massachusetts, en Estados Unidos, y que ha sido publicado recientemente en la revista American Journal of Alzheimer’s Disease and Other Dementias, ha dejado claro que el zumo de manzana puede tener cierto efecto sobre la evolución de la enfermedad de Alzheimer.
Vamos por partes: En el estudio quedaron incluidos una serie de pacientes, ingresados en el hospital debido a su enfermedad -que no era otra que una demencia tipo Alzheimer-. Y a estos pacientes se les administró, dentro de su dieta, dos vasos de zumo de manzana al día durante un mes.
Para entender un poco los resultados del estudio, hemos de dejar claras una serie de cuestiones: La enfermedad de Alzheimer, como enfermedad degenerativa que es, comporta una pérdida progresiva de las funciones superiores (memoria, orientación, capacidad de leer y escribir, entre otras). Según las funciones que haya perdido la persona debido a la enfermedad, podemos clasificar a los pacientes en diversos grupos. Para ello utilizamos la denominada Escala de Deterioro Global (GDS).
Cuanto más alto puntuemos en esta escala, mayor déficit habremos desarrollado, y más dependeremos de una tercera persona -nuestro cuidador-. Para conocer la situación “intelectual” de la persona que padece de Alzheimer también podemos utilizar el test de Lobo, del que ya habíamos hablado en alguna ocasión previamente en este espacio.
En relación con este ámbito de la vida (las capacidades que cada persona tiene para hacer frente al quehacer diario), y volviendo al estudio que hoy nos ocupa, los pacientes estudiados -aquellos diagnosticados de enfermedad de Alzheimer, y que tomaron dos vasos de zumo de manzana al día- no experimentaron ningún avance en sus habilidades del día a día. No mejoraron en la escala GDS, y es evidente que tampoco lo hubiesen hecho en el Test de Lobo).
Pero la cosa cambia cuando lo que se analiza es el estado anímico de estas personas. Existe otra escala, denominada Inventario Neuropsiquiátrico, que se centra más en éste, y que está diseñado de manera que sea el cuidador principal del enfermo quien nos informe sobre el comportamiento que éste presenta en el día a día (los cambios en el estado de ánimo, la irritabilidad…). Y en esta escala, los pacientes que tomaron los citados dos vasos de zumo de manzana al día, sí que presentaron una mejoría significativa (cifrada en un 27% en el estudio), en especial, en cuanto a la ansiedad, la agitación o la aparición de delirio en el paciente.
Por lo tanto, y simplificando mucho, la manzana no permite a los pacientes con enfermedad de Alzheimer mejorar sus funciones superiores (memoria, orientación, capacidad de adaptación…), pero sí los síntomas psíquicos (ansiedad, irritabilidad, estado de ánimo). En este sentido, estaríamos hablando de un auténtico antidepresivo para estas personas. Y, que se lo pregunten si no a los familiares de estos pacientes, un cambio del estado de ánimo para bien de la persona querida tiene un valor infinito, no cuantificable, y no se puede pagar con nada en el mundo.
¿Y de qué ha servido este estudio? ¿Se pueden extraer conclusiones que nos sirvan para otros estudios?
Pues, aunque pudiera parecer una curiosidad más que otra cosa, lo cierto es que, en una enfermedad en la que los medicamentos apenas son eficaces; proporcionan, en el mejor de los casos, una reducción temporal de los síntomas, pero no pueden prevenir el deterioro final de la función cognitiva, se nos abre una vía que puede darnos, quizás en un futuro no demasiado lejano, ciertas alegrías. Y ese camino no es otro que el de los cambios en la dieta, con la introducción de ciertos alimentos (la manzana en nuestro estudio de hoy) que pueden mejorar algún aspecto determinado. Algo es algo.
Fuente: http://www.onsalus.com/la-manzana-es-eficaz-en-la-enfermedad-de-alzheimer/340/articulo